La espinaca es un cultivo muy típico y su forma de cultivo requiere mucha atención.
El desafío
Las espinacas necesitan un punto de ajuste climático específico en el que la propagación de las plantas jóvenes y los periodos nocturnos requieren temperaturas significativamente más bajas, en comparación con otras verduras de hoja verde. Esto debe tenerse en cuenta a la hora de calcular el sistema climático y el estudio económico.
Además de las necesidades climáticas, las espinacas presentan otro reto: las raíces crean exudados. Los exudados son compuestos orgánicos que las raíces liberan al medio de cultivo. En las espinacas, los exudados de las raíces tienen un efecto negativo, ya que ciertos niveles de exudados hacen que la planta se contamine a sí misma. Dado que se trata de una interacción entre las raíces y el sustrato de cultivo, el problema es menos importante cuando se utiliza un sistema de cultivo aeropónico. Esto también se ve apoyado por el hecho de que no se recicla agua, o se recicla menos, y se devuelve al sistema de cultivo y el nivel de oxígeno es más alto, lo que es necesario para que la planta se recupere.
Las espinacas son un cultivo interesante en el mercado, ya que el abastecimiento de buen nivel (espinacas tiernas) es cada vez más difícil y los precios están subiendo.
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